25/11/13

"Sálvame de la boca del león , salva mi pobre vida del cuerno del unicornio " .

El mito del unicornio, que arranca de una serie de descripciones orientales y mesopotámicas, llegó a Plinio ( Historia natural ) en el siglo I , y este confirió a aquellas informaciones un grado excesivo de verosimilitud. Aristóteles, previamente, ya había expresado sus dudas sobre la existencia de este animal con un solo cuerno en medio de la frente ( monokeros ) y había postulado que , de animales unibanyuts sólo había uno , el que tiene un cuerno en la nariz , es decir , el rinoceronte . El hecho de que el cuerno del rinoceronte estuviera cargada de simbología y de supuestas propiedades terapéuticas y afrodisíacas ( hoy todavía es así ) hizo , por asimilación , que mucha gente creyera en la existencia del unicornio , y el cargara de virtudes y de leyenda . Se suponía que el unicornio era un animal más bien salvaje , con cara de cabra , o de chivo , y cuerpo de buey o de caballo , con un cuerno dibujando una espiral , que ningún cazador no podría nunca tomar a menos que se usara un ardid : el unicornio olía con especial deleite el olor de las chicas vírgenes y , cuando encontraba una , se le acercaba , reclinaba la cabeza sobre el regazo de la chica y se volvía dócil : entonces los cazadores podían capturarlo o matarlo -lo . Es una escena reproducida en una gran cantidad de grabados medievales , del siglo IX en adelante.


La devoción mariana siendo tan importante en la edad media , no pasó mucho tiempo que el unicornio fue relacionado con María , virgen por excelencia según el cristianismo , y así el mito - como ocurriría , según parece, con la devoción por la dama medieval que cantan los trovadores , cargada igualmente de marianismo - perduraría hasta el Renacimiento . Del siglo XV son , justamente, los famosos tapices de La Dame à la Licorne , que se conservan en el Museo de Cluny , en el centro de París , y que nadie visita porque se encuentran en una instalación dedicada casi por completo a la arte litúrgico : pero son una de las maravillas que pueden contemplarse en la ciudad que baña el Sena .

Es una serie de seis tapices : cinco representan los sentidos , todos con la presencia del unicornio y de la dama que protagoniza la serie , y el tapiz central- o así situado en Cluny - , que enseña la dama en el momento de hacer ofrenda de sus joyas . De ahí la leyenda que lo preside : " Mon seul désir ! " , Que debe traducirse como " Es lo que deseo " , y , con paráfrasis, "Porque yo quiero" , o " Nadie me obliga " . Durante tiempo esta leyenda se leyó inapropiadamente : " À mon seul désir ", lo que movió dos enormes poetas del XX, como Rilke ( los Cuadernos de Malte ) o Cernuda (que utiliza el lema como epígrafe de La realidad y el deseo ) , a pensar que estas palabras se referían al deseo amoroso , sensual o sexual . De hecho , no hay nada de eso : la dama del unicornio ha amansado a la fiera - al tapiz dedicado a la vista , el unicornio apoya gentilmente las patas delanteras en la falda de la chica- , pero ni la mata ni la captura como en muchas otras reproducciones del mito : a cambio de la sumisión de la bestia -a la que muchos comentaristas otorgan un sentido fálico - , la joven se desprende de sus riquezas , posiblemente superfluas , en un acto de sencilla caridad .
 Pareste animal se encontraría en una traducción incorrecta de una palabra de la Biblia , que sólo aparece en el Salmo 21 ( o 22): 

"Sálvame de la boca del león , salva mi pobre vida del cuerno del unicornio " . 

La palabra hebrea correspondiente es re'em , y no tiene mucho sentido traducirla, como hizo la Septuaginta , por monokeros , es decir , " con un solo cuerno " , bueno y estableciendo una distinción entre este supuesto animal y el animal que todo el mundo había visto , también con un solo cuerno , el rhinokeros . Pero así fue la cosa , y las Biblias que he consultado llevan en cuando la palabra unicornio en este punto , cuando en cuando la palabra búfalo , que parece más adecuada al original hebreo . Sea como sea, Jerónimo cayó en la trampa , y nos ofreció unicornios , lo que aseguraba una larga vida al mito del unicornio en lenguas romances .

El libro que nos ennova de estas cosas es : Michel Pastoreau y Élisabeth Delahaye , Las Secretos de la Licorne , París , 2013. Pero lo mejor será que el lector contemple los tapices del museo de Cluny , si nunca tiene la ocasión : eso ya vale un viaje a Francia .


fuente Jordi Llovet.

2 comentarios:

  1. Los animales mitológicos están compuestos por partes de otros animales, como el Grifo, que me viene ahora a la memoria. El Unicornio no es un caballo con cuerno; tiene cuerpo de caballo, patas de ciervo, cola de león y una barba de chivo. Los pintores y artistas que hacían los tapices supongo que lo interpretarían a su manera.
    Excelente entrada y muy bien documentada.
    Qué pena me dan los rinocerontes a los que asesinan o mutilan su cuerno para comerciar con él, con un fin que no tiene ningún sentido ni efectividad.
    Un beso :)

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  2. Hola Gumer!
    extenso comentario, que bien merecería una continuación a la entrada.

    Tendrían que mandar los animales en el mundo, para que pudiéramos aprender de ellos.
    dos besos :*

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